Mr. Holmes (2015) - Bill Condon
¿Qué decir cuando hay poco que aportar? Cuando una película es correcta, pero tampoco destaca en nada, cuando no se le puede achacar ningún defecto, pero tampoco ninguna distinción...Mr. Holmes (2015), proyecto academicista pensado para triunfar en los Oscars, probablemente se quede sin gasolina antes de la cita con las nominaciones. La realización es amable y serena, orientada hacia el agrado comunitario y la condescendencia hacia su personaje principal. Un protagonista destacable, pero del que se podría esperar algo más, si se tiene en cuenta que todo en ella trabaja en pos de su lucimiento. Ian McKellen está a la altura de las circunstancias y controla la situación, siendo lo más destacado de un proyecto más preocupado por no molestar que por atreverse a aportar.No te la puedes perder si:
-vives para recrearte en el personaje de Arthur Conan Doyle.
-crees en las diferentes vidas de Mr. Gandalf.
Más que correcta, diría que es una película con una puesta en escena aséptica y por lo tanto, sin olor ni sabor. Además, a medida que avanzaba su metraje me iba invadiendo la incomodante sensación de que su guión -para la construcción del personaje- hubiera sido escrito a partir del subrepticio rescate de apuntes y páginas desechadas que Wilder y Diamond tiraban a la papelera, allá por 1970, cuando escribían "LA VIDA PRIVADA DE SHERLOCK HOLMES". Tal es el cúmulo de referencias y concomitancias, que resulta inevitable conectar una y otra vez con aquella maravillosa obra maestra.
ResponderEliminar¿Dije que "MR. HOLMES" carecía de olor y sabor? Pues sí, claro, no me desdigo. Pero resulta curioso tratándose de un "refrito".
Un saludo.